El hornero generalmente habita en tierras bajas, cerca de lagunas y lagos o de cursos de agua, como arroyos y ríos. Esta ave prefiere los campos abiertos con escasas vegetaciones. Su hábitat incluye lugares como matorrales, pastizales o tierras agrícolas, aunque también se lo suele ver merodeando en los jardines de las viviendas de las personas o en parques urbanos A pesar de preferir las tierras bajas, se han observado especímenes volando a una altura de 3500 metros.
El hornero es monógamo ya que posee una pareja para toda la vida.
El nido es típico del género, un gran y grueso "horno" de barro arcilloso, de alli su nombre. Los dos miembros de la pareja participan en la construcción, trabajando siempre que haya material disponible. Con su pico como única herramienta, unen barro, pajitas, raíces, estiércol o crin de caballo hasta formar una bolita. con ese material construirán su nido, casi siempre sobre un sitio visible como ramas gruesas de árboles,. El interior está dividido por un tabique en dos zonas: una mayor, la cámara de cría; y una anterior más pequeña que es continuación de la entrada. Esta formidable estructura es construida en solo 6 a 8 días si las condiciones son favorables, pero usualmente lo completan en 2-3 meses. El nido pesa 4 o 5 kilos y es capaz de soportar hasta 100 kilos y adversidades climáticas durante años. Aunque se conserve intacto a lo largo del tiempo, todos los años construye uno o más, a veces sobre el anterior. Por eso pueden observarse como edificios de departamentos de varios pisos. Sus nidos abandonados son ocupados por otras aves que nidifican, como jilgueros, ratonas y también por pequeños mamíferos.
Amigos con esta reseña del Ave Nacional de Argentina, haré una pausa hasta Julio que viajaré a Bruselas, a compartir unos días con mi hija y su familia. Un gran abrazo y hasta la vuelta!!!!!!
